BAKLAVA
BAKLAVA
Hola a todos...
Aquí estoy de vuelta después de mas de cinco meses sin subir nada porque he estado un poco echa polvo con problemas de espalda y ciática por culpa de unas hernias discales, y no podía estar de pie ni siquiera para lavar la loza y menos pasarme una tarde haciendo un pastel o algo que requiera tiempo.
Y después de meses de fisioterapeuta, osteópata, quiromasagista y pastillas para parar un tren, junto con estiramientos, Pilates o aguas termales y.... sigo igual de mal que el primer día, aunque un poco mas animada.
Sobre todo porque me he unido al club mas popular del país, el de millones de parados en España....después de pensarlo mucho y considerando que mis problemas de salud son gracias a ese trabajo, el cual ya no puedo realizar; pues me he ido y feliz como una lombriz...jijiji
Bueno y no me enrollo mas y vamos con esta receta de un postre árabe que seguro os va a encantar, sobre todo a los golosos como yo porque es muy muy dulce y sencilla de hacer; además de que si la preparáis un día que tengáis invitados quedarán encantados.
INGREDIENTES:
150 g. almendra natural
150 g. pistachos
2 cucharadas de azúcar
1 cucharadita de canela en polvo
mantequilla sin sal
1 paquete de masa filo
Para el almíbar:
1/2 litro de agua
la piel de un limón
1 rama de canela
6 cucharadas de azúcar
PREPARACIÓN:
Comenzaremos poniendo las almendras en un cazo con agua hirviendo durante cinco minutos, pasado ese tiempo las escurrimos y cuando ya no quemen al tacto les quitamos la piel y ponemos en un papel absorbente para quitar el exceso de humedad.
Se pelan los pistachos y se reservan.
Mientras las almendras se secan un poquito vamos poniendo el almíbar a hacer, en un cazo colocaremos todos los ingredientes y dejaremos hervir a fuego medio de 10 a 15 minutos.
Ponemos el horno a precalentar a 180ºC.
En una sartén echaremos un poquito de aceite de girasol solo para engrasar el fondo, es decir unas gotas, y tostamos las almendras a fuego medio sin dejar de moverlas para que no se quemen, sacamos a un papel absorbente y esperamos que se atemperen un poco.
Cuando las almendras estén un poco templadas las ponemos junto con los pistachos, azúcar y la canela en una picadora y trituramos todo hasta que nos quede como una arenilla fina.
En un molde rectangular del tamaño de nuestra masa pintaremos un poco con un pincel y mantequilla fundida para pegar la primera lámina y que no se nos mueva, pondremos tres laminas una encima de la otra barnizando bien con la mantequilla fundida entre cada una para que se peguen y quede un buen hojaldrado.
Ahora cortamos en rectángulos del tamaño de un bocado mas o menos y metemos al horno entre 10-15 minutos a 180ºC; aquí es cuando según que tipo de horno tengamos varía el tiempo, ya que si tiene ventilador integrado solo serán 10 y un horno mas básico serán unos 15...lo sabremos cuando esté un poco doradito por encima.
Deberíamos tener sobre 10 hojas, si un paquete no llega o bien las cortamos por la mitad o usaremos dos paquetes.
Seguid siempre las instrucciones del paquete porque es una masa muy delicada y se seca enseguida, lo mejor es sacarla de la nevera un para de minutos antes de usar y mientras vamos colocando cada capa cubrirlas con un pañito limpio ligeramente humedecido.
Cuanto mas tiempo pase mas rico esta, lo mejor es dejarlo de un día para otro.
Podemos decorar con unos pistachos enteros o triturados, un poquito de azúcar glas o tal como sale; eso al gusto de cada uno y la creatividad que tengamos en el momento.
Miles de besos mis cocineros, espero que os haya gustado.
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